¿Cuándo explotará la bomba de la deuda económica de USA?
Por Nick Beams en Julio del 99. E-mail editor@wsws.org
Mientras con la escalada del mercado de valores en Wall Street, se ha dicho que el crecimiento de la tecnología de la información ha transformado a USA en una “nueva economía” hay una creciente preocupación de que este boom esté siendo sostenido con un aumento de la deuda, que más temprano que tarde hará explotar una gran crisis financiera, que ha de llevar a una grave recesión. Recientemente, informes de los sesudos del sector económico privado de USA como el Instituto Levy y el Centro de Mercados Federales así como el grupo de investigaciones basado en Londres, Lombard Street han señalado la naturaleza insostenible de este boom, recalcando el crecimiento de la deuda internacional y el ensanchamiento del déficit de la balanza de pago de USA.
El Instituto de Política Económica publicó en Julio 99 un importante informe del economista Robert Blecker con el título “La Bomba de Tiempo de la Deuda” que pretende demostrar por qué la posición finaciera de USA es insostenible. Blecker señaló que mientras un creciente número de observadores elogiaban a “la nueva economía”, había ciertos indicadores que “ensombrecían esos días soleados”. “Año tras año, mes tras mes, el déficit comercial de USA logra nuevos records. Y mientras pide prestado para cubrir el exceso de sus importaciones subre sus exportaciones, su lugar como el mayor deudor del mundo crece a saltos. Muy relacionado a esto está el bajo índice de ahorro en el sector privado que obliga al país a pedir prestado continuamente al extranjero, a pesar del cambio en el balance del presupuesto federal de déficit a exceso. De hecho la actual prosperidad de la economía USA descansa sobre cimientos frágiles: un salto en los gastos del consumidor que a su vez se basan en una burbuja del mercado de valores doméstico, combinado con un refinanciamiento externo del déficit comercial. Si estas tendencias continúan, la deuda externa americana se hará insostenible a la larga. Ningún país puede pedir tanto prestado del exterior sin disparar una devaluación de su moneda y una contracción de su economía. El aumento del déficit comercial y la explosón de la deuda externa son señales de aviso de problemas subyacentes que si no se corrigen pueden colapsar la economía americana más temprano que tarde”. El informe de Blecker destaca el crecimiento estable de la deuda externa de USA en los pasados quince años y el rápido empeoramiento de su situación financiera desde finales del 1997. Desde una posición balanceada en 1983, préstamos continuos para cubrir déficits en la balanza de pago crónicos en la década, convirtieron a USA en el mayor deudor del mundo después de haber sido el mayor acreedor. Al final de 1997 la deuda total era de $1.22 milones de millones. Pero después de la exclusión de las reservas de oro hechas por el Departamento del Tesoro y la inversión extranjera directa de corporaciones internacionales, ambos valores no-líquidos, la deuda financiera neta, que comprende la diferencia entre los valores financieros líquidos de USA (bonos del gobierno, de corporaciones y otros) propiedad extranjera y los mismos valores propiedad de americanos, la deuda neta era de $1.57 millones de millones. Mientras los USA se convirtieron en deudores a mediados de los 80, la entrada total de inversiones era aún positiva en los 90 porque las utilidades en inversiones directas (en las que USA es aún acreedor neto), excedieron las utilidades en inversiones financieras (en las que USA es deudor neto). Sin embargo en los últimos años, la inmensa carga de la deuda neta financiera ha sobrepasado la diferencia de las utilidades y las entradas netas por inversiones han tenido balance negativo desde 1997.
Blecker señala que, mientras la noción de una eventual crisis financiera de USA “parece lejana en una época en que la economía USA es la envidia de casi todo el mundo”, la historia reciente está “llena de episodios en que la confianza en economías particulares ha cambiado rápida y dramáticamente: el desastre de Mejico en 1994-95 después de la euforia pre NAFTA; la epidemia de crisis en el Este y Sudeste Asiático en 1997-98 después de las alabanzas al milagro económico de Asia y el surgimiento de los mercados financieros”.
“Estas experiencias demuestran que los saltos en gastos, alimentados por expectativas optimistas excesivas pueden llevar a posiciones financieras insostenibles, incluyendo burbujas especulativas en los mercados de valores y una sobrevaluación de las relaciones de intercambio, con posibilidades de una revisión de las expectativas y una crisis inevitable.”
Y tal como él continúa, los USA no han sido inmunes a crisis de confianza en el pasado. En 1978-79 su sistema financiero fue golpeado por una rápida pérdida de confianza en el dólar que causó la intervención del entonces presidente de la Reserva Federal Paul Volcker quien rehizo el presupuesto de la administración Carter, alzó los intereses a un 20% y trajo la más profunda recesión después de la guerra.
La crisis financiera de finales de los 70 vino del colapso del sistema de relaciones de intercambio de Bretton Woods después que Nixon retiró el apoyo del oro al dólar y la consiguiente decisión de dejar que el dólar se devaluara para mejorar la posición de mercadeo de USA. El régimen de interés alto de Volcker restituyó la confianza en el dólar, pero llevó a un aumento de la fisura del intercambio comercial (pues las exportaciones se hicieron más caras mientras las importaciones se hicieron más baratas) y al aumento de la deuda externa. Ahora la crisis de confianza en el dólar USA que hizo erupción hace 20 años amenaza con resurgir con más fuerza aún por una deuda externa aún mayor.
Igual que los problemas de finales de los 60 que causó la eliminación del sistema de relaciones de intercambio fijos de Bretton Woods, fueron causados por la tenencia de grandes cantidades de dólares por bancos extranjeros, el problema al final de los 90 es la acumulación de grandes cantidades de valores financieros de USA de todo tipo, - incluyendo valores y bonos del sector privado así como reservas del banco central oficial (que son sobre todo mantenidos en forma de bonos de seguro del Tesoro). La extensión de la crisis potencial puede deducirse del aumento dramático del control extranjero sobre los bonos de seguros desde finales de 1995. En los pasados tres años el control foráneo de los bonos de seguridad que no son del Tesoro ha subido de $900 mil millones a 2 millones de millones, mientras que el control de casi $1.3 millones de millones de bonos de seguridad del Tesoro al final de 1998 que eran casi el 35% de toda la capacidad en esa época, caso el doble de lo que fue al inicio de los 90.
Blecker advierte que si viene una crisis del dólar y el Buró de la Reserva Federal trata de contrarrestarla con alza del interés, esto puede traer consecuencias económicas devastadoras.
Con deudas del consumidor subiendo a niveles record en relación a la entrada familiar, un aumento en los intereses aumentaría la carga de los servicios de la deuda familiar y llevaría a las familias más necesitadas al borde de la bancarrota (especialmente si el desempleo comienza a subir como consecuencia del aumento de los intereses).
Haciendo un estimado del efecto en USA de una crisis del dólar, Blecker señala que “algunos cálculos simples revelan que puede resultar una seria depresión económica”. Asumiendo que el déficit fuera de $270 mil millones y que la mitad de esto fuera eliminado por la caída del valor del dólar (recortando las importaciones y aumentando las exportaciones) se requeriría un 6% de disminución en la entrada nacional real para cerrar el resto del déficit de pago. Esto significaría un ajuste de la magnitud de lo han sufrido Brasil, Mejico, Korea y Tailandia en los últimos tiempos y mayor que cualquiera de las recesiones que han sufrido los USA recientemente.
posted by Mike L Palomino 7:16 PM
Tema: A DiosRogando y Con El Mazo Dando.
Los republicanos dicen que si se pone en mural en las escuelas los Diez Mandamientos, mejorará la situación de violencia.
Pero las balaceras han ocurrido precisamente en lugares ideales para los santurrones.
Si hay una correlación entre la devoción cristiana y la recta conducta hacia la ley, es contraria a lo que dicen estos señores; la religión y la violencia van de la mano.
SI LA VIOLENCIA JUVENIL ES LA PREGUNTA, LA RELIGION NO ES LA RESPUESTA.
Steve Chapman.
Miercoles Junio 30 de 1999;
Dirigiéndose a un acto de ministros religiosos “Dios Sí, No Armas” cerca del Capitolio un par de semanas atrás, el lider de la mayoría republicana Tom DeLay dió su explicación de la matanza de Littleton, Co: “Recibí un e-mail esta mañana que lo aclara todo; el estudiante escribe: “Querido Dios, ¿por qué no pudiste evitar la matanza de Columbine? y Dios contesta: Querido estudiante, lo hubiera hecho, pero no me permiten entrar en las escuelas”.
El enfoque de los republicanos es que la violencia juvenil aumenta porque la religión declina. Ciertamente hasta la decisión de la Corte Suprema respecto a la oración en las escuelas en los 60, la exposición de los Diez Mandamientos era común. Y el crimen mucho menor. Por eso la Casa de Representantes votó para remediar el daño permitiendo a los estados que exijan poner los Diez Mandamientos en escuelas y otros edificios públicos. Como los Diez Mandamientos prohiben matar, ellos piensan que exponiéndolos la gente se cohibirá de hacerlo.
Por otro lado, la ausencia de moral religiosa y de normas puede inclinar a alguien al homicidio. El argumento toma fuerza particular en los hechos de Columbine cuando uno de los asesinos le pregunta a dos muchachas si creen en Dios, cuando le contestan que sí, las mata. La correlación es plausible, pero una correlación no es una causa. Si descubriéramos que ninguno de los asesinos tenía puesta indumentaria de desayunarse con panqué, pudiéramos establecer una correlación. Pero nadie dirá que los muchachos mataron porque no comieron suficiente panqué ni apoyará una campaña en este sentido.
Después de buscar una relación entre A y B hay que demostrar que una es la causa de la otra. En este ejemplo, sin embargo, los republicanos alegan haber encontrado una causa sin tener siquiera una correlación. Porque no existe.
USA ES EL MAS RELIGIOSO DE TODOS LOS PAISES INDUSTRIALIZADOS. Van a la iglesia una vez a la semana el 44% de los americanos comparado con un 27% de los ingleses; 21% de los franceses; 16% de los australianos y 4% de los suecos. Pero el crimen no es menor en USA; es mayor: siete veces comparado con Francia; seis con Gran Bretaña; cinco con Australia y Suecia. Japón, donde casi no hay cristianos muestra el menor índice de crimen violento de todos los países. Hay algunas naciones de alta asistencia a iglesias y bajo crimen, como Irlanda, Italia, Bélgica, pero son excepciones.
Dentro de los cincuenta estados no hay nada que demuestre que una población temerosa de Dios equivale a una población obediente a la ley.
El Cinturón de la Biblia (región geográfica donde se localiza su uso), muestra esta relación: A Dios rogando y con el Mazo dando.
Louisiana posee la mayor asistencia a iglesias y su índice de asesinato es doble del promedio. Para el resto del Sur el patrón es el mismo. El estado Totem Bíblico de Tom DeLay, Texas, muestra un índice de asesinato tres veces mayor que el de Massachusetts, que ha sido tan rebelde a Dios que eligió a dos congresistas abiertamente homosexuales.
Nueva York, el símbolo de la depravación es perfectamente promedio.
En el estado de Washington, donde no se madruga para ir a la iglesia, el índice criminal es 38% más bajo que el promedio.
Los representantes republicanos tampoco han notado que las balaceras no se han dado en las Mecas del humanismo secular como Berkeley; Cambridge o la Ciudad de Nueva York, sino en ciudades que habrían sido orgullo para Norman Rockwell y James Dobson.
Pearl, Miss.;West Paducah, Ky.; Jonesboro, Ark.; Edinboro, Pa. y Springfield, Ore. no son exactamente la tierra de Madalyn Murray O’Hair.
Littleton fue tierra fértil para las iglesias evangélicas. No es que la fé sea causa de la muerte ni mucho menos. Pero indica que cuando los republicanos hablan de los Diez Mandamientos, deben poner atención al noveno: no levantar falso testiminio.
posted by Mike L Palomino 8:32 AM
De gatos y perros…
George Carlín.
La mayoría de la gente sabe que los gatos son muy diferentes de los perros, los que les gustan por diferentes razones. Una cualidad de los gatos que gusta mucho es la independencia; que la mascota pueda atenderese a sí misma. “No tengo que hacer nada; él limpia su cuarto, prepara su ropa y maneja hasta su trabajo”
Diferentemente de los perros, que tanto nos necesitan y nos quieren porque sabemos donde está su comida, los gatos no entran en falso afecto. No se vuelven locos ni nos babean todos cuando volvemos a casa, como los perros. Ellos dosifican el afecto para darlo de cuando en cuando, aunque esto probablemente sea más un fenómeno de electricidad estática que cariño animal.
Otra cualidad admirable de los gatos es la inmunidad; cuando cometen errores no aceptan responsabilidad ni muestran arrepentimiento. Cuando hacen algo relmente estúpido, como saltar a una mesa y tumbar cuatro tazas de café, de algún modo convierten el accidente en una rutina. Los perros no. Si un perro choca con una lámpara, se sabe de sólo mirarlo; se siente culpable y avergonzado. El gato no; cuando rompe algo pasa a la siguiente actividad como si nada. “Qué volá, ¿la lámpara? ¿Y a mí qué? ¡Que se joda! Yo soy el gato. Pregúntenle al perro…”
El gato disimula sus errores, parecen actos intencionales. ¿Han visto un gato atravesar una habitación corriendo como un loco y chocar con una puerta de cristal; ¡suávana! Y barajar la situación…”fue a propósito” Entonces usted lo ve zigzagueando hasta detrás del sofá, donde se pone las patas en la cabeza: “Ay Dios…Ay coño…Cago en mi madre….!
El gato es demasiado orgulloso para dejarse ver sufriendo, pero si miras detrás del sofá lo verás recuperándose; “Hola, Quería saltar del sofá a la ventana y no llegué. Me jodí un ligamento. ¿Hay un poquito de leche por ahí?”
Los gatos son muy sensibles al tacto, les gusta sobarse con las piernas del dueño; si usted posee un gato y una pierna, tiene un gato feliz; ¡Ay qué pierna más rica! Si usted tiene dos piernas, mejor: “Oh, ahora puedo hacer un número ocho” Pero aún si uno no está, el gato comienza a hacer el ocho de sólo verlo venir.
¿Le ha pasado la mano a un gato por la espalda? Levantan el culito como si le hubieran tocado un botón. Aveces te lo ponen en la cara si está en la cama con uno.
Los perros no tienen prioridades ni agenda. A veces caminan alegremente hacia algún lugar pero se detienen súbitamente y se muerden el lomo por unos minutos. Cuando terminan de morderse, olvidan a lo que iban y miran alrededor, confusos. Como hacen cualquier cosa en cualquier momento, también te hacen pasar pena. Puedes tener visita en la casa; vaya, gente de no mucha confianza y a la que quieras de algún modo impresionar. Y todos sentados en la sala y un saladito en la mesita; en animada conversación y el perro tirado en el piso en medio de todos. ¡De pronto, con el rabo del ojo veo, no lo puedo creer; el tipo comienza a lamerse los güevos: y de qué manera! Nadie dice una palabra…
posted by Mike L Palomino 8:28 AM
Una traducción de un artículo de Bertrand Russell muy interesante. He tratado de darle un carácter marcadamente cubano...
stión de si Cristo fue el más sabio y mejor hombre. Generalmente se da por sentado que todos creemos eso. Yo no. Pienso que hay muchos puntos en los que coincido con Cristo mucho más que los que profesan el cristianismo. No sé si pueda ir con él en todo, pero sí pudiera ir más profundamente. Recordarán que dijo, “No te opongas al mal. Si alguien te da una bofetada en la mejilla derecha, ofrécele también la izquierda.” Eso no es un precepto nuevo, lo usaron Buddha y Lao-tse quinientos o seiscientos años antes que él, pero los cristianos no lo usan mucho que digamos. Muchos piensan que esto es sentido figurado.
Hay otro punto que considero excelente. Recordarán que Cristo dijo, “No juzgues, pues serás juzgado.” Ese principio no es muy popular en las cortes judiciales de los países cristianos. He conocido a muchos jueces cristianos que nunca pensaron que actuaban contra los principios cristianos en lo que hacían. También dijo Cristo, “Dale al que te pida, no huyas de él”. Este es bueno. Uno debe asumir que los políticos no siguen las enseñanzas de Cristo.
Otra máxima de Cristo que no es muy popular entre nuestros amigos cristianos es aquélla que dice, “Si quieres la perfección ve y vende todo lo que tienes y dáselo a los pobres.” Eso es algo excelente, pero como digo, no se practica mucho. Todo muy bien, aunque difícil de cumplir. Yo no cumplo con eso, pero yo no soy cristiano.
Defectos en las enseñanzas de Cristo.
Después de concederle excelencia a estas máximas, llegamos a ciertos puntos a los cuales uno no puede conceder sabiduría ni bondad suprema a Cristo, según lo que se expone en los Evangelios; y aquí debo decir que no hablamos de la cuestón histórica, pues desde el punto de vista histórico es bastante dudosa la existencia de Cristo, y si existió nada se sabe de él. Este punto de vista es muy controversial y no lo trataremos. Me interesa Cristo tal como aparece en los evangelios, en cuyas narraciones hay cosas no muy sabias. Por ejemplo, él pensaba que su segundo advenimiento sería entre nubes gloriosas antes de que murieran los que a la sazón vivían, y hay muchos textos que lo prueban. Dice, por ejemplo, “No armonizarán las ciudades de Israel hasta que el hijo del hombre venga”. Y luego, “Hay algunos aquí que no probarán el sabor de la muerte hasta que el hijo del hombre venga a su reino”; y otras muchas situaciones en donde queda claro que él creía que volvería por segunda vez antes de que muchos vivos murieran. Esa fue la creencia de sus primeros seguidores y la base de una buena parte de su enseñanza moral . Cuando dijo, “No piensen en el futuro”, y cosas así, se debía en gran medida a sus ideas de una pronta segunda vuelta y la poca importancia de los asuntos mundanos. A propósito, he conocido a muchos cristianos que creían en la inminencia de un segundo advenimiento. Conocí a un predicador que intimidaba a su congregación diciéndole que la segunda vuelta era realmente inminente, pero se consolaban cuando lo veían sembrando árboles en su jardín. Los primeros cristianos sí que lo creían y se abstenían de cosas tales como sembrar árboles en los jardines. Al respecto, no fue tan sabio como otros, está claro.
El problema moral.
Y ahora los asuntos morales. Hay un serio defecto, para mí, en el carácter moral de Cristo; que creía en el infierno. No concibo que ninguna persona profundamente humana pueda creer en el castigo eterno. Ciertamente Cristo, como se pinta en los evangelios, creía en esto, y uno encuentra una y otra vez su furia rencorosa contra quienes no escuchaban sus prédicas y que de algún modo le restaban suprema excelencia. Por ejemplo, esa actitud no se encuentra en Sócrates, que era refinado y cortés hacia los que no querían escucharlo, lo que es, pienso yo, más digno de un maestro que la vía de la indignación. Probablemente todos recuerden las cosas que decía Sócrates cuando estaba muriendo, y en general las cosas que decía a los que no concordaban con él.
Se encontrará en los evangelios que Cristo dijo, “Serpientes, generación de vívoras, cómo podrán escapar de la condenación del infierno.” Eso se lo decía a los que no gustaban de sus prédicas. No me parece que sea el mejor tono y hay mucho de esto acerca del infierno. También están las palabras acerca del pecado contra el espíritu santo: “Aquél que hable en contra del espíritu santo, no será perdonado ni en este mundo ni en el que viene.” Esas palabras han causado un sufrimiento indecible en el mundo, porque gente de toda clase ha imaginado que ha cometido pecado contra el espíritu santo y ha pensado que no sería perdonado en ninguno de los dos mundos. Realmente, no creo que ninguna persona con un mínimo de bondad en su naturaleza habría impuesto ese terror en el mundo.
También dice Cristo, “El hijo del hombre enviará a sus ángeles, que sacarán de su reino las afrentas, a los inicuos, y los fundirá en un horno y habrá lamentos y crujir de dientes.” Y sigue con los lamentos y el crujir de dientes un versículo tras otro y se manifiesta al que lee un cierto placer en contemplar éstos. También ha de recordarse, lo de las ovejas y los machos cabríos; cómo en su segunda vuelta él los va a separar y va a decirles a los machos cabríos, “Lejos de mí, malditos, hacia el fuego eterno.” Y vuelve, “Si tu mano pecase, córtala; mejor vivir manco que ir al infierno con dos manos, al fuego que nunca se apaga y los gusanos que nunca mueren.” Eso lo repite una y otra vez. Debo decir que considero a todo esto del fuego infernal como castigo para el pecado como una doctrina que trajo la crueldad al mundo y dio al mundo generaciones de tortura; y el Cristo de los evangelios, tal como lo pintan sus cronistas, debería ser tomado como responsable de eso en parte.
Hay otras cosas menos importantes, por ejemplo la falta de bondad en poner al diablo en los puercos para que se despeñaran hacia el mar. El era omnipotente y podía simplemente haber espantado a los demonios, no haberlos dirigido a los cerdos. Además está la curiosa historia de la higuera, que para mí es un enigma. “El tenía hambre y al ver a lo lejos una higuera frondosa, se acercó a ver si por casualidad podía encontrar algo; pero sólo tenía hojas, pues no era la época del higo. Y Jesús dijo ‘Que nadie coma tu fruto jamás’ y dijo Pedro: ‘Maestro, la higuera que maldeciste se marchitó.” Una historia muy curiosa, porque no era época para higos y de verdad que no había que culpar al árbol. No veo que en materia de sabiduría o virtud Cristo esté al nivel de otras personas de la Historia. Creo que podría poner a Buddha y Sócrates por encima.
El Factor Emocional.
Como ya he dicho, no creo que el argumento sea la razón verdadera por la que la gente acepte la religión. La aceptan por una cuestión emocional. A veces le dicen a uno que es malo atacar la religión, que ésta hace al hombre virtuoso. Así me dicen; yo no lo he visto. Hay una sátira con ese tema en el libro Erwhon Revisited de Samuel Butler. En Erewhon hay un tal Higgs que llega a un país lejano y después de cierto tiempo se escapa en un balón. Veinte años más tarde regresa y encuentra una religión en la que él es adorado bajo el nombre de “El niño del Sol”, que se dice subió al cielo. La Fiesta de la Ascención va a celebrarse y escucha a los doctores Hanky y Panky decirse que nunca habían visto al hombre Higgs ni esperaban verlo; pero ellos son los sacerdotes supremos de la religión. El está indignado y les va a decir, “Voy a revelar toda esta farsa y contarle al pueblo de Erewhon que soy yo, el hombre Higgs; que subí en balón.” Y le advierten, “No debes hacer eso, porque toda la moral de este país se basa en ese mito y si llegan a saber que no ascendiste al cielo se volverán perversos”; persuadiéndolo de ese modo. El se marcha tranquilamente.
Esa es la idea _ que degradaremos moralmente si abandonamos la religión cristiana. A mí me parece más bien que los que han profesado el cristianismo han sido bastante perversos. Un hecho curioso es que, mientras más intensa ha sido la religión en cualquier período y más profunda la creencia dogmática, más grande la crueldad y peor el estado de cosas. En la llamada edad de la fé en que los hombres sí creían en la religión cristiana a plenitud, hubo Inquisición con sus torturas; hubo millones de infortunadas mujeres quemadas por brujas; y todo tipo de crueldad practicada por todo el mundo en nombre de la religión.
Si uno mira al mundo alrededor ve que el más mínimo progreso en el sentimiento humano; cada mejora en la legislación criminal; cada paso hacia la eliminación de guerras, mejor trato a razas de color, disminución de la esclavitud y progreso moral que hubo en el mundo ha tenido que enfrentar a las iglesias organizadas del mundo. Por eso digo, deliberadamente, que la religión cristiana, tal como se organiza en sus iglesias, ha sido y es todavía el principal enemigo del progreso moral en el mundo.
De Cómo las Iglesias Han Retardado El Progreso.
Se puede pensar que voy demasiado lejos cuando digo que todavía eso es así. No lo creo. Cosideremos un hecho. Me apoyarán cuando lo mencione. No es un hecho agradable, pero es que las iglesias lo obligan a uno a mencionar hechos desagradables. Supongamos que en este mundo en que vivimos hoy día una joven se casa con un hombre sifilítico; la Iglesia Católica diría, “Esto es un sacramento indisoluble. Deben permanecer en celibato o seguir juntos. Y si siguen juntos no deben utilizar métodos anticonceptivos para evitar el nacimiento de niños sifilíticos.” Sólo aquél cuyas simpatías naturales han sido torcidas por el dogma , o cuya naturaleza moral está muerta para todo sentimiento de sufrimiento puede mantener que es bueno que siga ese estado de cosas.
Eso es sólo un ejemplo. En el presente hay muchas vías por las cuales las iglesias, por su insistencia en lo que llaman moral, le causan sufrimiento innecesario e inmerecido a todo tipo de personas. Y desde luego, como sabemos, se opone mayormente al progreso y la prosperidad de muchas formas en que podría atenuarse el dolor en el mundo, porque ha acuñado el término moralidad dentro de un marco estrecho de reglas de conducta totalmente ajenas a la felicidad humana; y cuando alguien dice que hay que hacer esto o lo otro porque contribuye a la felicidad humana, ellos contestan que eso no viene al caso. “¿Qué tiene que ver la felicidad humana con la moral? El objeto de la moral no es hacer feliz a la gente.”
Terror, el Fundamento de la Religión.
Pienso que la religión se basa, sobre todo, en el miedo. Parte en el miedo a lo desconocido y parte la agradable sensación de que un hermano mayor te apoya en todos las tribulaciones. La verdadera base de todo esto es el miedo; a lo misterioso, a la derrota, a la muerte. El terror es el padre de la crueldad, por tanto es fácil ver que la crueldad y la religión siempre han ido de manos. Porque el terror es la base de ambas. En el mundo actual estamos empezando a comprender las cosas y un poco a dominarlas con ayuda de la ciencia, que se ha ido desplazando paso a paso contra la religión cristiana, las iglesias y todos los viejos preceptos. La ciencia puede ayudarnos a superar ese terror pánico en que ha vivido la humanidad por tantas generaciones. La ciencia y nuestro propio corazón nos pueden enseñar a no seguir buscando apoyos imaginarios alrededor, no seguir inventando aliados del cielo, sino a confiar en nuestro propio esfuerzo aquí abajo para transformar el mundo en un lugar habitable, en vez de lo que las iglesias de estos siglos han hecho.
Qué Debemos Hacer.
Pongamos firmes los pies en la tierra y miremos de frente al mundo _ las cosas buenas, las malas, las bellas, las feas; veámoslo como es y no nos amilanemos. Conquistemos al mundo por la inteligencia y no dejándonos subyugar servilmente por el miedo que nos causa. Todo el concepto de Dios deriva del despotismo ancestral del Oriente. No vale la pena para los hombres libres. Cuando se oye a la gente en la iglesia diciendo que son unos miserables pecadores, en su autodegradación se muestran abyectos y no parecen seres humanos que se respeten. Debemos ponernos de pié y mirar al mundo cara a cara. Debemos hacer al mundo lo mejor que podamos y si no logramos que sea tan bueno como queremos, de todos modos será mejor que el que ha hecho toda esta gente todos estos siglos. Un buen mundo necesita conocimiento, bondad y coraje; no necesita de una tendencia compungida al pasado ni de un encadenamiento del pensamiento libre a palabras expresadas largo tiempo atrás por hombres ignorantes. Un mundo bueno necesita una mirada desafiante y un pensamiento libre. Necesita esperanza en el futuro, sin aferrarse a un pasado muerto, que confiamos ha de ser superado por ese futuro que nuestra inteligencia ha de crear.
Un adelanto sobre Thomas Paine, en que no queda Washington muy bien parado....(Continuará...)
Thomas Paine, a pesar de su participación prominente en dos revoluciones y casi haber sido colgado por intentos de hacer una tercera, está un poco opacado hoy día. Para nuestros abuelos fue una especie de Satanás en la tierra, como un rebelde sedicioso y subersivo contra su Dios y su Rey. Se ganó la más amarga hostilidad de tres hombres generalmente no vinculados: Pitt, Robespierre y Washington. Los dos primeros buscaron su muerte. El tercero se abstuvo con cautela de tomar medidas que salvaran su vida. Pitt y Washington lo odiaron por demócrata; Robespierre por oponerse a la ejecución del Rey y al Reino del Terror. Fue su suerte ser honrado por la oposición y odiado por los gobiernos. Washington, mientras él estaba combatiendo a los ingleses, alabó a Paine; la nación francesa le rindió honores hasta que los Jacobinos subieron al poder; incluso en Inglaterra los más prominentes hombres de estado fueron sus amigos y lo emplearon para hacer sus manifiestos políticos. Tenía defectos, como los demás; pero fue odiado y calumniado por sus virtudes.
La importancia de Paine en la historia consiste en que democratizó la defensa de la democracia. En el siglo XVIII había demócratas entre la aristocracia de Francia y de Inglaterra, entre la intelectualidad y los ministros no conformistas. Pero todos presentaban sus especulaciones políticas en forma atractiva sólo a la gente instruída. La doctrina de Paine no contenía nada novedoso, pero fue muy innovador en su manera de escribir; simple, directa, no rebuscada, de modo que cualquier trabajador inteligente podía entenderlo. Todo esto lo hizo un tipo peligroso; pero cuando se sumó su falta de ortodoxia religiosa a sus otros crímenes, los privilegiados no perdieron la oportunidad de sumirlo en oprobio.
Los primeros treintiséis años de su vida no evidenciaban su talento, que apareció más tarde en su obra. Nació en Thetford en 1739, de padres cuáqueros pobres y fue educado en la escuela primaria local hasta la edad de trece años, en que se hizo stay-maker. Sin embargo, una vida tranquila no era de su gusto, y a la edad de diecisiete años trató de enrolarse en un barco pirata llamado El Terrible, cuyo capitán se llamaba Muerte. Sus padres lo rescataron, salvándolo de la muerte, pues 175 de los 200 tripulantes poco después murieron en acción. Poco después, sin embargo, cuando estalló la guerra de los Siete Años, pudo salir en otro de estos barcos, pero no se sabe mucho de sus breves aventuras en el mar. En 1758 consiguió trabajo en un taller manual en Londres, y al año siguiente se casó, pero su esposa murió algunos meses después. En 1763 se hizo recaudador de impuestos, pero fue despedido dos años más tarde por haber admitido que hacía inspecciones mientras realmente estudiaba en casa.
En la mayor pobreza, se hizo maestro de escuela primaria a diez chelines por semana y trató de entrar en la orden anglicana. De tales movimientos desesperados lo salvó el ser restituído como cobrador de impuestos en Lewes, donde se casó con una cuáquera de quien por razones desconocidas se separó formalmente en 1774. En este año perdió nuevamente su empleo, aparentemente por organizar una petición de sus compañeros de trabajo para aumento de sueldo. Vendiendo todo lo que poseía pudo escasamente pagar sus deudas y dejar algo a su mujer, quedando él mismo reducido a la miseria.
En Londres, donde trataba de presentar la petición de los cobradores de impuestos al Parlamento, conoció a Benjamín Franklin, causándole una buena impresión. Como resultado, en Octubre de 1774 embarcaba para América, pertrechado con una carta de recomendación de Franklin que lo describía como un “joven valioso e ingenioso”. Tan pronto llegó a Filadelfia mostró sus habilidades de escritor y casi inmediatamente se hizo editor de un periódico.
Su primera publicación, en Marzo de 1775 fue un vigoroso artículo contra la esclavitud y la trata de la que siempre se mantuvo siendo un enemigo irreconciliable, a pesar de lo que algunos de sus amigos americanos dijeran. Parece haber sido principalmente por influencia suya que Jefferson introdujo en el borrador de la Declaración de Independencia el pasaje sobre este tema que más tarde fue eliminado. En 1775 existía en Pensylvania todavía la esclavitud, que fue abolida por un Acta de 1780, cuyo preámbulo, generalmente se cree, él escribió.Paine fue, si no el primero, uno de los que abogaron por la completa libertad de los Estados Unidos por primera vez. En Octubre de 1775, cuando hasta muchos de los que firmaron la Declaración aún esperaban por algún arreglo con el gobierno inglés, él escribió:
”No dudo ni por un momento que el Todopoderoso finalmente separará América de Gran Bretaña. Llámese Independencia o lo que se quiera, si es por causa de Dios y la humanidad, así será. Y cuando el Todopoderoso nos bendiga y nos haga sólo de él dependientes, que entonces nuestro primer acto de gratitud sea una ley continental que detenga la importación de negros y su venta, suavice la dura suerte de los aquí presentes y procure en un tiempo su libertad”.
Fue por el bien de la libertad-- de la monarquía, aristocracia, esclavitud y todas las formas de tiranía-- que Paine tomó la causa de América.
Durante los días más duros de la guerra de Independencia pasó los días en campaña y las tardes componiendo manifiestos estimulantes publicados bajo la firma de “Sentido Común”, que tuvieron un éxito enorme y esencialmente llevaron a la victoria. Después que los ingleses quemaron las ciudades de Falmouth en Maine y Norfolk en Virginia, Washington escribió a un amigo (Enero 31, 1776): “Unos pocos más de estos llameantes argumentos que se vieron en Falmouth y Norfolk, sumados a la profunda doctrina y el razonamineto incuestionable contenidos en el panfleto Sentido Común, no dejará dudas sobre la necesidad de separación”.
El trabajo tenía sentido local y sólo tiene valor histórico ahora, pero hay frases que todavía hablan. Después de señalar que la controversia no era sólo con el rey sino también con el Parlamento, dice: “No hay asociación de hombres más celosos de sus privilegios que los Comunes: porque los venden”. En aquella época era imposible negar la justicia de este insulto.
Hay un argumento vigoroso en favor de una República y la refutación triunfante de que la monarquía evita la guerra civil. “Monarquía y linaje,” dice después de un análisis sumario de la historia inglesa, “ha dejado al mundo en cenizas y sangre. Es una forma de gobierno contra la que Dios da testimonio y donde siempre habrá sangre.” En Diciembre de 1776, en momentos adversos de la guerra, Paine publicó un panfleto nombrado La Crisis, que comenzaba así: “Estos son los momentos en que se prueban las almas de los hombres. El soldado de verano y patriota de tiempos buenos, en la crisis, se retirará del servicio a su patria; pero el que se mantiene firme ahora merece el amor y el agradecimiento de cada hombre y mujer.”
Este ensayo se leyó a las tropas , y Washington reconoció a Paine su “sentido vivo de la importancia de su trabajo.” Ningún otro escritor se leía tanto en América, y pudo haber hecho grandes sumas de dinero de su pluma, pero siempre se negó a aceptar dinero por lo que escribía. Al final de la guerra de Independencia, era respetado universalmente en los Estados Unidos, pero pobre todavía; sin embargo, la legislatura de un estado votó por asignarle una cierta suma de dinero y otro le dió una residencia, así que tenía todo lo necesario para vivir cómodamente por el resto de su vida. Se podía haber esperado que él se estabilizara en la respetabilidad característica de los revolucionarios exitosos. Volvió su atención de la política a la ingeniería y demostró la posibilidad de puentes de hierro con mayor alcance de lo que se había considerado factible. Por estos puentes volvió a Inglaterra, donde fue recibido amistosamente por Burke, el duque de Portland , y otros notables del partido de los Whig. Hizo montar un modelo grande de sus puentes de hierroen Paddington; fue elogiado por eminentes ingenieros y parecía que iba a pasar el resto de sus días como inventor.
Sin embargo Francia estaba tan interesada en puentes de hierro como Inglaterra. En 1788 fue de visita a París a discutir sobre ellos con Lafayette y mandarlos a la Academia de Ciencias que, con cierto retraso, contestó favorablemente. Cuando cayó la Bastilla, Lafayette decidió obsequiar la llave de la prisión a Washington y confió a Paine la tarea de llevarla a través del Atlántico. Paine, sin embargo, estaba ocupado todavía en Europa por asuntos de su puente. Escribió una larga carta a Washington informándole que encontraría a alguien que lo sustituyera en la tarea de llevar “este temprano trofeo de los despojos del despotismo y los primeros frutos maduros de los principios americanos trasplantados a Europa.” Sigue diciendo: “No tengo la más mínima duda del éxito final y total de la Revolución Francesa,” y que “He construído un puente de arco simple de 110 pies de envergadura, y cinco pies de la cuerda del arco.”
Por un tiempo, el puente y la Revolución estaban balanceados en su interés, pero gradualmente la Revolución ganó. Esperando llamar la atención de algún movimiento en Europa escribió Los Derechos del Hombre, en los que descansa principalmente su fama de demócrata.
El trabajo, que fue considerado muy subversivo durante la reacción anti-jacobina, impresionará al lector moderno por su delicadeza y sentido común. Es fundamentalmente una respuesta a Burke y trata extensamente eventos contemporáneos de Francia. La pimera parte se publicó en Francia en 1791, la segunda en Febrero de 1792; aún no había, por tanto, necesidad de disculpas por la Revolución. Hay muy poca disertación sobre Derechos Naturales, pero mucho acerca del gobierno británico. Burke había discutido que la Revolución de 1688 había comprometido a los ingleses para siempre a lo establecido en la Ley de Sucesión al trono. Paine responde que no es posible atar la posteridad y que las constituciones deben ser susceptibles de revisión de tiempo en tiempo.
Los gobiernos, dice él, “pueden considerarse todos dentro de tres grandes categorías. La primera, superstición. La segunda, poder. Tercero, el interés común de la sociedad y los derechos comunes del hombre. La primera fue el gobierno del clero, la segunda de los conquistadores, la tercera de la razón.” Las dos primeras se amalgamaron: “la clave de San Pedro y la del Tesoro se fundieron y la multitud engañada celebró el invento.” Tales observaciones en sentido general, sin embargo, son escasas. Lo grueso del trabajo consiste, primero, de historia francesa de 1789 hasta finales de 1791 y segundo, de una comparación de la Constitución Británica con la que se estableció en Francia en 1791, con ventaja para ésta, desde luego. Debe recordarse que en 1791 Francia era todavía una monarquía. Paine era republicano confeso, pero no enfatizó mucho eso en sus Derechos del Hombre.
La invocación de Payne, excepto algunos pasajes, fue al sentido común. Atacó la economía de Pitt, como Cobbett hizo más tarde, con argumentos atractivos a cualquier otro Canciller del Tesoro; describió la combinación de pequeños e inseguros fondos e inmensos préstamos con poner a un hombre con pata de palo a alcanzar una liebre-- mientras más corren más se apartan. Habla del área de papel moneda de Potter, frase en el estilo de Potter. De hecho, fueron los escritos de Cobbett en finanzaz que convirtieron la primera animosidad en admiración. Su objeción al principio hereditario, que daba horror a Burke y Pitt, fue más tarde argumento común entre muchos políticos, incluyendo a Hitler y Mussolini. Ni su estilo pierde serenidad nunca; es claro, vigoroso y preciso, ni tan abusivo como el de sus oponentes.
De todos modos Pitt decidió inaugurar su reino de terror enjuiciando a Paine y suprimiendo Los Derechos del Hombre. De acuerdo con su sobrina Lady Hester Stanhope solía decir que “Paine estuvo exactamente bien pero comenzó a moverse, ¿qué puedo hacer?. Como están las cosas, si apoyara las opiniones de Paine tuviéramos una revolución sangrienta.” Paine respondió con discursos ardientes . Pero ocurrían las masacres de Septiembre y los Tories reaccionaban con gran ferocidad. El poeta Blake, --que tenía una retórica más sabia que Paine –lo persuadió de que si se quedaba en Inglaterra sería colgado. Se escapó a Francia, sólo horas antes de que llegaran los oficiales de su captura en Londres y veinte minutos en Dover, donde lo dejaron pasar por portar una carta amistosa de Washington.
Aunque Inglaterra y Francia no estaban en guerra todavía, Dover y Calais eran ciudades de mundos distintos. Paine, que había sido electo ciudadano francés honorario, había sido retornado a la Constitución por tres diferentes cámaras de comercio, una de las cuales era Calais, que ahora le daba su bienvenida.
posted by Mike L Palomino 2:47 PM
Diles que no me maten.
Recuerdo las palabras de Rudyard Kippling: “No te pido, Dios, que me dejes vivir mi propia vida, sino que me dejes morir mi propia muerte”
A mi modo de ver, Kippling quiso sintetizar el concepto de Nietszche de que el hombre es un puente y no una meta; un proceso y no un evento. No una película americana, por cierto, donde los desenlaces, por regla general, malogran el drama inicial.
¿Dónde radica la aceptación de cada individuo, de un Juez que dicte la suerte de su vida y muerte? No en conceptos divinos, seguramente. No en el mundo civilizado allá afuera, afortunadamente. En USA, bueno, hay cosas curiosas al respecto.
Un Juez de la Corte Suprema que cite al Nuevo Testamento en el sentido de que el gobierno deriva su autoridad moral de ejercer su ira con la espada, directamente de Dios y no hablando de enemigos externos sino del propio ciudadano, no es un juez muy justo que digamos. Si a eso se suma el hecho de que considera al crimen como un fenómeno de la expresión del mal en cada individuo y no con raíces sociales como piensa Ortega y Gasset con la mayoría de los filósofos que todos aceptamos en el mundo de hoy día, no podemos estar muy tranquilos que digamos.
Dice este señor que, por lo que llevo dicho cualquiera sabe que me refiero a Antonin Scalia, respecto a si
los puntos de vista religiosos deben jugar algún papel en los procesos político y legislativo, que sí, que
siempre ha sido así en este país. Y de hecho lo ha demostrado recientemente, con su voto en el Supremo autorizando el sistema de vales para escuelas religiosas. Y sin embargo expresa: “No creo que ninguno de mis puntos de vista religiosos tenga algo que ver con mi trabajo de juez”
Cree este juez que la razón por la cual USA no está mayormente por la abolición de la pena de muerte, como sí lo está la Europa postcristiana (gracias a Dios), es porque este pueblo va a la iglesia y que mientras más cristiana es una nación, menos considera que sea inmoral la pena de muerte. Que para el creyente cristiano la muerte no es gran cosa y los que se oponen a ese castigo, incluyendo al Papa, demuestran la influencia de Napoleón, Hegel y Freud.
Dice el Juez que la pena capital no es un castigo cruel, aún si no se admiten las atenuantes como quiere que se admitan la Corte. Que no tiene autoridad la Corte para desear que los jurados consideren las evidencias atenuantes y la clemencia o para creer que sea buena idea no tener penas de muerte obligatorias. También expresa que aquel juez para el cual la pena de muerte sea inmoral, debe renunciar, “en vez de olvidarse de leyes constitucionales y sabotear la pena de muerte. He llegado a esa conclusión y estoy muy feliz, pues me gusta mi trabajo”.
La fórmula del justo juez para Scalia es simple; si matas, te mato. Dice que de este modo no habría los problemas que ahora vemos; que si matas a un negro, que si matas a un blanco…Yo no sé usted, pero a mí me llama la atención que sólo negros sean muertos por policías blancos y no al contrario. Si aplicamos la fórmula al Sida, se debería de matar a todos los portadores del virus para que no infecten a otros, o ¿por qué no se dedica todo el esfuerzo y capital necesario para descubrir una cura? También habría que matar a los locos que maten…
Pues, precisamente en Junio 20, la Corte Suprema votó 6-3 por declarar inconstitucional, violatorio de la Octava Enmienda en su prohibición del castigo cruel e inusual, la ejecución de los retardados mentales. Esto desató la ira de tres jueces de tendencia derechista, de participación decisiva en la elección de Bush; Antonin Scalia, Clarence Thomas y William Rehnquist. Los tres disidentes acusan a la mayoría de buscar apoyo en la opinión nacional e internacional abolicionista. Sostienen que la aplicación pena capital tiene que ver más con el crimen que con el estado mental del criminal.
posted by Mike L Palomino 6:07 PM
Este es el momento de evitar que la inacción, la desidia o la indiferencia permitan que el coloso del Norte imponga por fuerza lo que no ha podido con la propaganda.
NO PROBLEM; NO CASTRO.
1.- Cuando llegó Colón.
El Almirante Colón hubiera descubierto a Miami, si a los dos meses de haber salido del
puerto de Palos en España, el tercero de Agosto de 1492, no hubiera visto bandadas de
pájaros volar en sentido suroeste, sospechando que iban buscando tierra. Claro que el
nombre de la ciudad sería otro; probablemente La Española y no necesariamente
Colombia, en detrimento del Almirante de los Mosquitos, por no haber traído las riquezas
prometidas más que por la pretendida culpa de las atrocidades contra las aborígenes, pues
ya se sabe que la crueldad sólo comenzaba su espiral. Malo que el "gran continente hasta
ahora desconocido" fuera atribuído en nombre a otro señor italiano que lo había
explorado nueve años después de Colón, porque bastaba para la Historia un descubridor
genovés, un emperador de Córcega y un salvador de Roma.
Que la colonización no fué genocidio sólo pueden decirlo los que no quieren verlo.
Europa, que vino a cristianizar a los nativos acabó con cuatro de cada cinco de ellos, lo
que trajo como consecuencia que toda la tradición oral desapareciera en aspectos tan
importantes como la cría de sus animales, que fueron perdiendo calidad; las técnicas de
irrigación y de cultivo, de construcción de puentes y terrazas; el tesoro cultural de razas
milenarias. La civilización europea encontró nuevos cultivos en estas tierras, trajo otros
que se adaptaron de modo inesperado, se llevó la fertilización, que salvó de la ruina a la
agricultura en Europa, que no la conocía. La agricultura, matemática, escritura y
astronomía habían sido desarrolladas antes de Cristo. No había ciudad en España mas
populosa que Tenochtitlan.
Los que vinieron a cristianizar cometieron actos bárbaros como quemar colecciones
completas de libros mayas y cobrar rescate por Atahualpa y asesinarlo de todos modos
(aunque, generosamente, ofreciéndole escoger entre estrangulamiento y hoguera), además
de traerles enfermedades para los que no tenían anticuerpos.
Sin hablar del oro y la plata que saquearon como bárbaros, convirtiendo en lingotes el
fruto cultural de una civilización. Como dijo Bernal Díaz: "Vinimos aquí a servir a Dios
y a hacernos ricos" , confesando así su sentimiento de complicidad divina. Ricos no sólo
por el oro y la plata, que podía haberlos hecho la potencia más fuerte de Europa por
mucho tiempo con la mitad de la inteligencia de los cristianizados, sino por los cultivos
que se llevaron: papa, maíz, tomate, aguacate, ají, fresa, maní, calabaza, frijoles, piña,
chocolate. Muchos de estos cultivos fueron expuestos por Castro como estrategia de
lucha de los países pobres contra los ricos por la deuda externa.
2.- ¿Miami es Cuba?
Es decir que la vida no quiso que Miami fuera construída con "la belleza de los pueblos"
en mente, según la "Ley de Indias" , sino más bien con la falta de planificación
urbanística que resulta lógica de un crecimiento rápido determinado más por los intereses
políticos que por la equilibrada y sagrada balanza de oferta y demanda. La
administración norteamericana hace como que desea derrocar a Castro y la gran
población medio-cubana de Miami hace como que puede lograrlo.
Aquélla es una ciudad alucinante. Característica de la falta de identidad cultural. De las
numerosas colonias de inmigrantes en los Estados Unidos, ninguna ha pretendido salirse
del crisol de fundición; todas hablan un mismo idioma y muestran una misma cultura
excepto los días de desfile conmemorativos nacionales; por lo demás, poco queda que se
diferencie del comportamiento cotidiano regimentado por el Dios-Dolar. Sin embargo, la
razón misma de la existencia de la comunidad determina que sea atípica. En todo
conglomerado poblacional del país, ya sea gran ciudad o pequeño pueblo pueden trazarse
grandes rasgos del perfil social: se trabaja por un salario con el que se consume el
producto de parte del trabajo de otro que a su vez ha rendido una ganancia que nunca es
compartida; se vive el albur de las agencias de seguro contra todo; se recrea una vida
espiritual en las iglesias. No es que Miami escape a esta descripción somera, es que no
se conforma. Allí se define el molde de lo que los americano-cubanos quieren para Cuba.
Aunque es sabido que, como fórmula matemática, el salario es un número en el cálculo
de costos del empleador, que se endosa al empleado a cambio de su trabajo, cambio que
debe ser bastante desigual porque no hay un ente intermedio de arbitraje, significa una
herejía en aquel lugar no "ser agradecido". El residente en otras comunidades sabe cuán
crudamente se plantea la cuestión del empleo, apartado de toda consideración coyuntural:
nadie le exige agradecimiento. Sabe que las agencias de seguro son inversiones en las
figuras estadísticas de las probabilidades de que pase lo malo; un juego cruel del que tiene
con el que teme. La vida en Norteamérica es apta sólo para conquistadores naturales.
El que mire hacia atrás, como se dice en el Libro de Dzyan, está perdido. Y los
pobladores cubanos de Miami mantienen sus relojes detenidos en el último día del año
1958, aferrándose a un patriotismo híbrido en el lugar menos apropiado del mundo: la
meca del egoísmo; donde los hijos no quieren a los padres porque a éstos no les queda
tiempo libre que dedicarles; el lugar donde el esclavo comparte con el rico el último
banquete a que los convida el Evangelio: tú gozas el cielo, yo gozo la tierra; allí donde el
Cristianismo radical cedió en su lucha secular contra el Cristianismo conformista,
dejando el campo libre a la más conservadora sociedad protestante burguesa.
Los cubanos desarraigados del exilio son dignos más de compasión que de odio, porque
saliendo del César cayeron en la intríngulis del binomio Dios y Burgués. Pero día a día
destilan el odio a un pasado reciente viviendo en la quimera de un pasado lejano, con una
cáscara tenaz resistiendo a la rueda de los tiempos, argumentando en perjuicio del
enemigo las mismas cosas por tan largo tiempo que parece que quieren autoconvencerse.
Un joven descendiente de cubanos del exilio es fácil de detectar por sus deficiencias en
ambos idiomas, por la falta de dominio de cuestiones básicas de la cultura hispánica,
hasta por señas externas del genotipo. Está demostrado que la influencia del medio
ambiente sobre los jóvenes durante largos períodos de tiempo hace aparecer tanto en la
raza como en el individuo nuevos aspectos estructurales y mentales, modificando
gradualmente a las células de las glándulas sexuales, cuyos tejidos pueden adaptarse al
nuevo medio, aunque es cierto que el individuo no trasmite sus características adquiridas.
El desastre moral del exilio, cualquiera que sea y en cualquier tiempo, sólo se constata
después de la derrota, que aunque humilla siempre, es en este caso en que el individuo se
lo juega todo y lo pierde cuando se ven manifiestaciones de derrumbe espiritual:
repetición de ideas fijas, obsesión con la identidad, odio autodestructivo. Sabe que está
perdido, más que nadie lo sabe, pero aceptarlo equivaldría a la aniquilación y por eso en
el ghetto se aplican reglas locales para cosas universales como la masonería, la iglesia, la
diplomacia, los espectáculos artísticos y tantas otras. Allí el sentido de supervivencia
tiene categoría suprema y hay que reconocer que han tenido constancia en sus esfuerzos.
La gran tragedia del exilio fue confiar en la Lógica más que en la Historia. Pudo más la
Geopolítica que el sentido patrio en la decisión de abandonar la batalla contra la
Revolución en espera de la intervención norteamericana, una solución más racional que
pasional. Nadie que se hubiera planteado la ecuación política de Enero de 1959, __con
las variantes de fuerza, geografía, predictibilidad e intelecto de cada una de las partes en
pugna, sin haber dado crédito a la información genética y a cuestiones ancestrales__,
hubiera confiado en la permanencia de Castro por cuarenta años en pie de guerra,
resistiendo a traiciones, reveses y dudas como nadie en la Historia, aunque bien es cierto
que un enemigo de su envergadura está aún por ver. No se puede considerar al Norte
como el único enemigo, pues en honor a la verdad no lo ha sido para la Cuba
revolucionaria en mayor medida que para todo el resto de la humanidad, ni le lleva
ventaja en su afán al exilio cubano, que mayoritariamente ha jurado lealtad a la nación
americana.
Sólo que se le ha resisitido sin la desvergüenza usual en nuestros países latinoamericanos.
El mismo inmenso daño que ha sufrido mi pequeño país, víctima de la guerra económica
__ que en definitiva es la única guerra posible __, hecha por el más poderoso y rapaz de
los países, lo ha experimentado cualquier otro en la esfera de su influencia, aunque se
mire desde diferente ángulo.
Sucede que otros países no tienen una proporción significativa de su población en actitud
vertical dentro del imperio en contra de su nación, algo sui generis en la historia del
mundo. Quizás uno de los peores errores de Castro haya sido haber aceptado la rendición
de la brigada mercenaria en Playa Girón. No hay nada en la jurisprudencia internacional
que lo hubiera condenado por haber barrido una invasión de naturales del país traídos por
el enemigo. Creo que el canje de prisioneros de guerra por medicinas y alimentos fue un
acto de orgullo, con cierto valor estratégico en cuanto tiene que ver con la diplomacia,
pero dejó mucho que desear en la táctica futura; hombres que se hicieron símbolo en la
lógica torcida del exilio, pero símbolo al fin. El acto contrarrevolucionario del Orange
Bowl con Kennedy a la cabeza, recibiendo a los mercenarios cubanos, inauguró una
época de contradicciones en un mundillo raro: Los agentes de la CIA que prepararon el
plan, los dirigentes cubanos del exilio y los propios mercenarios sabían que el presidente
americano no se comprometería en tremenda jugada en la eventualidad de la falta de
apoyo de la población. Pues bien, no hubo apoyo, se derrotó la intentona en 72 horas,
entonces ¿qué se estaba celebrando?. Aún más ¿qué se le reprocha a posteriori a
Kennedy?. Bastante humillación sufrió el país con el embajador ante la ONU negando
los bombardeos iniciales. Esta prueba es la primera del entreguismo del exilio; no
agradecer al gobierno americano el esfuerzo hecho hasta donde pudo llegar. ¿Qué
significaba la causa del exilio; justo reclamo o mascarón de proa?.
La historia de las relaciones de Cuba con los Estados Unidos no puede separarse del
contexto de todo el Caribe: en la medida en que crece la seguridad nacional de los
Estados Unidos disminuye la de los países de la región. La Doctrina Monroe en 1823
anunció las intenciones colonialistas exclusivas respecto a los últimos reductos del
imperio español: Cuba y Puerto Rico. Dos intentos de adquisición en 1848 y 1853 para
convertir a Cuba en esclava. Provocación del Maine en 1898 en La Habana.
Establecimiento de un protectorado por medio de la Enmienda Platt en 1901. Nueva
intervención de 1906 a 1909. Imposición de condiciones después de la revolución del 33.
Derogación de la enmienda Platt en 1934, luego del dominio pleno de los asuntos
cubanos. Invasión de Bahía de Cochinos en 1961 con mercenarios cubanos al estilo de
1954 en Guatemala.
La seguridad nacional de Estados Unidos lo mismo ha utilizado al anticomunismo más
escrupuloso como ha apoyado a los regímenes más sangrientos del mundo mientras que
han mantenido la estabilidad social, entendida como obediencia debida al imperio más
que asunto soberano. Esgrimir la excusa de la falta de libertad en Cuba para no tener
relaciones es una gran hipocresía.
Algo interesante en la sicología de Miami es una especie de escalafón en la llegada al
exilio, pues el mérito disminuye con el tiempo. A los ojos del exiliado es sospechoso de
colaborador con el enemigo todo aquél que ha salido tarde de Cuba, cuyo pueblo
supuestamente siempre ha estado sufriendo y resistiendo a la dictadura, lo que es muy
contradictorio.
Hay una categoría de contrarrevolucionarios que en justicia deben ser analizados con
óptica especial, pues las causas y azares en que se vieron envueltos son marcadamente
diferentes a los del resto: los alzados. Entre otras cosas escogieron el escenario histórico
adecuado, se fueron para el monte, pensando que muy pronto se repetiría la hazaña aún
fresca de los barbudos. Es cierto que aspiraban a la ayuda del Norte, pero eso nada tiene
en sí de malo. Es tan así que llegaron a ser bastante populares entre los campesinos y
sólo desaparecieron con la llegada de un contingente numeroso de la milicia.
El que escoge el camino del exilio para seguir luchando contra el gobierno de Cuba no
comprende la sicología de la geografía: aquí estoy yo, allá los demás; estar aislado es
estar fuera de la isla.
Prueba de que la lucha guerrillera tuvo un carácter diferente es que la inmensa mayoría de
los liberados del presidio por este concepto hicieron una vida normal y pacífica hasta que
hijos y nietos descubrieron la posibilidad de escapar a la tierra prometida con estas viejas
causas.
Resumiendo, podemos sacar de lo dicho hasta ahora varias categorías en la población del
exilio en Miami: una masa civil de batistianos, palabra que en sí misma encierra la
filosofía política de esos tiempos, y no una posición específica; apolíticos inadaptables al
sacrificio revolucionario y simplemente simpatizantes del modo de vida americano;
ex-alzados salidos de la cárcel en tiempos diferentes; veteranos ex-mercenarios y
traidores. ¡Ay, los traidores!.
En el último grupo aparecen los que fueron funcionarios, militares o imparciales del
gobierno junto a un estrato muy especial de la sociedad cubana: los disidentes
permanentes, los que continúan disintiendo del sistema en donde ya no viven, los que
están fuera porque hablaron dentro, es cierto, pero que mejor se callaran la boca, si
entendieran la verdadera diferencia entre disidente y traidor: su posición respecto al
enemigo.
Si los disidentes actuales cubanos lo fueran de veras, comprenderían que abandonar el
terreno los invalida para su actividad. Puede haber razones de peso para emigrar, pero el
peso de razones debiera inhibir al disidente emigrado en su nueva posición.
3.- El verdadero enemigo.
No se puede perder de vista el objetivo principal de la lucha política histórica; el principal
enemigo del país__, el que escamoteó la victoria de un ejército que se enfrentó a las
mejores fuerzas de España, que impuso una enmienda a la Constitución, abolida cuando
ya el dominio sobre el país la hacía innecesaria, cuyas trasnacionales controlaban el
grueso de la economía nacional__ siempre ha sido el país del Norte.
Es perfectamente comprensible que el ciudadano se preocupe por cuestiones civiles, eso
ni siquiera debe cuestionarse. Lo malo es hacerse eco de la inmensa propaganda por la
cual el disidente en Cuba se convierte en partidario del establecimiento de un estado
utópico respecto a la observación de los derechos humanos, que en ningún lugar del
mundo existe en una medida ni siquiera menor que en Cuba. Mucho menos en los
Estados Unidos, donde nada que no sea autofinanciado puede ser soberano. La defensa
de los derechos humanos en Estados Unidos es un producto de exportación. La justicia
americana es un monstruo que funciona para el que pueda pagarla, un privilegio como el
arte, la cultura, la salud y la educación. El abogado de oficio es una triste historia
estadística de casos ganados; con una inmensa mayoría de condenados que se declaran
culpables para disminuir las penas; con una muy controversial selección de jurados,
donde se tienen que balancear los componentes raciales para evitar explosiones sociales.
La propia administración de inyecciones letales para los condenados a muerte, en la que
el país es pionero, es criticada en el mundo entero por cuanto utiliza la estética médica
para ennoblecer un acto sin ninguna ética, que es en sí mismo bárbaro. Hay menos
pruebas de que esto no es cruel que de la falta de efectividad de esta muerte, cuando los
propios condenados han tenido que asistir a los discípulos de Hipócrates en canalizar una
vena o han muerto después de horribles convulsiones. Es sabido también que esta pena
de muerte es una oferta política, así como que la intercesión de gobernadores en condenas
injustas más allá de toda duda razonable obedece a causas meramente políticas. El
derecho humano a igual salario por igual trabajo es una atribución que cede
generosamente la sociedad capitalista al empleador.
En el estado de North Dakota, en el año 1997, después de ser rechazada en dos
oportunidades seguidas por ambas cámaras, se aprobó el acta de los derechos civiles
donde se condenaba la violación ilegal de esos derechos. Allí donde el perro de un
ciudadano es manifiestamente preferido a un niño indio, donde existen más de 120
iglesias para menos de 50 000 habitantes de su capital, hubo reacción para aprobar una
condena de las violaciones ilegales de los derechos humanos, lo que hace sospechar la
posibilidad de violaciones legales. Y los activistas en Cuba piensan que esta materia es el
pan nuestro del ciudadano americano, cuando más bien es un producto de exportación.
El primer derecho humano en el mundo había de ser el derecho a la vida, entendida como
la posibilidad de desplegar las potencialidades creativas del hombre dentro del marco de
su cultura y con trazos de su identidad individual, sin esas coacciones institucionalizadas
de la sociedad que por tradicionales parecen inevitables; las religiones. El surgimiento
del estado laico fue una necesidad dialéctica en la vida del hombre, no por concesión de
la religión sino en respuesta a las evidentes incongruencias del dominio espiritual sobre
los asuntos sociales y sólo al reclamo del ser social.
Era demasiado contradictorio mantener un maridaje entre los negocios de Dios y del rico
mientras se habían puesto en boca de Jesús palabras de negativa a la entrada de los cielos
al socio principal. Por tanto sería una tendendia histórica y natural el advenimiento del
estado ateo. De hecho los asuntos prosaicos del diario vivir se desentienden
absolutamente del dominio religioso en los países autodenominados civilizados, pues de
nada vale ser muy piadoso si no se tiene con qué pagarle a un hospital católico, bautista, u
otro cualquiera. Realmente resulta incomprensible que en asuntos de política se utilice a
Dios, que no se ve, como punta de lanza contra los ateos, que sí se ven.
Hay que ver lo que significa el hombre trabajador sin temor a las enfermedades, sin la
resignación de ver a sus hijos sin educación, con el goce pleno del tesoro público de su
cultura. Debiera dejarse a Dios para las necesidades espirituales solamente, que el
hombre conociera como primer deber el ayudar al otro, para darle una proyección lógica
al Dios Innecesario que todas las religiones pintan, un Dios que tuvo su historia a partir
de la irrupción de la filosofía judeo-cristiana en la Cosmogonía de los pueblos más
antiguos, atribuyendo a la Causa Más Elevada y Unica, al Principio Universal Deífico, la
creación inmediata de nuestra Tierra y del hombre en contradicción flagrante con el
Esoterismo Oriental, que nunca ha rebajado a la Deidad Unica Infinita hasta semejantes
usos. En el Rig Veda no aparece Brahma, sino muy modestamente Rudra y Vishnu, que
fueron con el tiempo los dioses del credo exotérico. Todos los dioses personales desde
los albores de la historia son de la tercera manifestación cósmica, siendo la primera el
Rayo de la Deidad Oculta hiriendo la Materia Cósmica Primordial, propiciando al
producto andrógino, la Fuerza Dual Abstracta Macho y Hembra, la segunda
manifestación . Finalmente, en la tercera, esta fuerza se separa en otras siete; los
llamados Poderes Creadores por las antiguas religiones y las Virtudes de Dios para las
iglesias romana y griega que les rinde culto bajo las personificaciones de los Siete
Arcángeles. Demasiado humana la interpretación de la batalla de los dioses y los ángeles
caídos.
Algo curioso y lleno de contenido es la posición de la iglesia católica en el exillio, con
respecto a la de la isla. Cuando se oyen declaraciones de ambas partes no parecen alas de
un mismo pájaro, con lo que queda demostrado que la conciencia religiosa es también un
fenómeno geopolítico además de geográfico. La iglesia en Cuba ha pasado
satisfactoriamente la prueba más difícil: perseverar en su labor evangélica sin interferir en
los asuntos de un estado autoproclamado ateo. Con serenidad admirable ha convivido en
una sociedad que con hechos demuestra que tampoco el reino de la tierra es accesible a
los ricos, que el egoísmo es no sólo la peor enfermedad del género humano, sino que es
incurable, mientras que la pobreza tiene cura. Un sacerdote de mi pueblo, se atrevió a
pedir la bendición de Jesús para sus hermanos comunistas, lo que, en honor a la verdad,
no fue muy bien acogido por muchos feligreses.
En su bienvenida a Juan Pablo II, el arzobispo de Santiago, Pedro Meurice fue bien
explícito en diferenciar el sentido patriótico cubano del apoyo político al gobierno actual,
lo que es correcto en cuanto deje claro también su diferencia con cualquier sentido
religioso. Habría que poner al arzobispo en la Ermita de la Caridad del Cobre de Miami
para que hiciera la misma diferenciación. Yo recuerdo muy bien sus palabras en fecha
conmemorativa de la parroquia de Manzanillo, a la luz de candilejas: "Tenemos miedo de
todo, tenemos miedo de tener miedo".
No es el miedo de una persona humana, es el miedo de la tradición judeo-cristiana, de una
idiosincrasia que necesita un redentor que pague por culpas ajenas.
Una denuncia al miedo parecida la podemos encontrar en el Nuevo Trato de Roosevelt en
1933 cuando dijo que el miedo es lo único a lo que hay que temer, en una época en que
con el comienzo de la gran depresión y el advenimiento de Hitler, el partido comunista
ganaba creciente simpatía con su coalición anti-fascista y su apoyo a los cambios sociales
de la década, incluso entre idealistas de la clase media. Luego la derecha los acusó de
comunistas, cargo de mucha gravedad después del pacto nazi-soviético del 39. Las
convocatorias al valor por lo general siempre han estado dirigidas contra el comunismo.
Hay una predisposición contra el comunismo profundamente arraigada en el espíritu
humano, marcada por una cultura abiertamente egoísta, que irrumpió entre los dioses del
politeísmo griego, aplastó el magnífico multipartidismo del Olimpo y lo que es peor;
inculcó en la mente del hombre la noción de criatura más favorecida de Dios, haciéndolo
sordo a los reclamos de justicia social.
La lucha contra el Comunismo no conoce fronteras, ni límites, ni ética. Lo mismo una
universidad que una institución privada o un sindicato, ha discriminado a algún
comunista o socialista. Comités congresionales (HUAC), Departamento de
Justicia-Gobierno ( Loyalty-Security Program; 1947), Corte Suprema, Fuenteovejuna,
señor; todos a una, más allá de toda ética o justicia: persecuciones, mentiras, abusos.
En la época del triunfo de Castro, los caballeros cruzados de la Libertad y la Democracia
en el mundo, dejando en el campo de batalla a miles de víctimas del anticomunismo,
daban una convincente demostración de tratamiento a la disidencia política.
4.- ¡No tengáis miedo, Don Karol!
Dicen que Castro invitó al Vicario de Dios a llegar a Cuba en ocasión de una de sus
visitas a Latinoamérica. Pero este viejecito simpático era tan anticomunista que rechazó
el ofrecimiento porque Cuba estaba demasiado alineada a la Unión Soviética de esos
tiempos, con lo que parece quedar demostrado, si es cierta su infalibilidad en asuntos
religiosos, que Dios es también anticomunista.
Aunque el exilio cubano consideró la visita papal a Cuba como un fracaso para Castro, lo
cierto es que todo lo que condenó en sentido universal pudo haberlo dicho en cualquier
otro lugar, sin embargo, fue muy específico en asuntos como el neoliberalismo y el
capitalismo.
El cubano del exilio es, sencillamente neurótico. Claro que aquí el concepto de neurosis
ha de ser más amplio que la mera transformación de los impulsos libidinales y el
simbolismo sexual, comprendiendo también el dominio obsesivo de la protesta viril.
Busca elevar su personalidad debido a su sentimiento de disminución, lo que lo hace
enmascarar su tendencia vergonzosa de apátrida. Y como efecto compensatorio de ese
complejo de inferioridad está lo mismo Dios que su idea directriz de antifidelismo.
Excepto los comunistas "to'er mundo e güeno", lo que, además de incierto sienta un
precedente peligroso: la redención de los pecados, por la que en un domingo se limpian
los pecados semanales del mundo. Al decir Le Rochefoucauld que jamás examinó el
alma de un hombre malo; pero una vez examinó el alma de un hombre bueno y retrocedió
espantado, estaba dando la clave del problema del autoanálisis de conciencia: conflicto de
intereses; no se puede ser juez y parte al mismo tiempo. No tiene sentido dejar a la vaga
interpretación de una escritura antigua el código moral de un ser social como el
ciudadano. El objeto del hombre es un acto y no un pensamiento, aunque fuese éste el
más noble, como dijo Carlyle. Y no hay otro modo de lograr la interacción de actos
nobles y efectivos en la sociedad si no es con sistemas de justicia social, pues ya ha
quedado bien demostrado que las instituciones caritativas han fracasado en ese objetivo.
La maldad no es patrimonio exclusivo de los ateos, entre los que más bien he visto una
menor proporción de canallas. Es más, la incompatibilidad entre las religiones ha sido
históricamente mayor que la del ateísmo con ellas. Mucha es la sangre que ha corrido
entre los hombres en nombre de Jesús.
Miami estuvo de fiesta cuando llegó el Papa a Cuba. Como siempre sus expectativas
quedaron en el vacío. La euforia por el Papa fue la misma que crea una visita anunciada y
celebrada por el gobierno y el partido. Miami no entiende que el pueblo cubano ve en esa
figura a un defensor potencial, porque siempre se ha opuesto de oficio al bloqueo del
fuerte contra el débil. Se equivoca el que piense que la masa silenciosa interpretó esta
visita como algo hostil. Se equivoca el Papa como se equivocan muchos de sus vicarios
si creen seriamente que el pueblo cubano no actúa de otro modo por miedo; la virilidad de
nuestro pueblo no necesita pruebas.
Cuando el Papa se refiere a los derechos humanos se dirige a todo el mundo, pues esa es
su ética.
El balance total de esta visita favoreció a Cuba en cuanto desmiente la persecución
religiosa. Como dijo el Cardenal, las puertas siempre han estado abiertas, aunque lo que
ellos querían era que les abrieran la oportunidad de la enseñanza religiosa a los niños,
espacios de difusión y otros privilegios que nada aportan a la justicia social. La sabiduría
popular no se deja engañar; ni la iglesia ni el Papa garantizan en el vasto mundo cristiano
las mejoras sociales que se ha procurado el pueblo cubano, que en definitiva es el que
produce. No se necesita ser simpatizante de Castro para reconocer los logros de la
Revolución o el legado histórico que ella misma representa.
Si Miami y el exilio en general encuentran en la iglesia el crecimiento espiritual de que
hablan, a pesar de las desigualdades sociales, ése es su derecho; quizás la necesiten más
que nosotros. Si ya han olvidado el papel parcializado de la iglesia a favor de España en
nuestras luchas independentistas frustradas o el concepto nada místico de Maceo sobre
Patria y Libertad cuando pone en primer término al filo del machete, el pueblo cubano lo
recuerda muy bien. Es probable que en nuestra naturaleza no haya calado bien la
evangelización de los primeros colonos y sea verdad la leyenda que nos enseñaban en la
escuela sobre el aborigen que, a instancias del cura para darle su pasaporte al cielo,
respondiera que si allá iban los españoles, él no quería ir.
No es muy osado pensar que en la originalidad de nuestro sincretismo cultural de mezcla
de orishas y nuevo testamento radique una diferencia fundamental con países vecinos.
Sepan que estamos hablando del mismo pueblo de: ¡Cree en Dios y no corras!. De aquél
que profesa su pragmatismo con: "A Dios rogando y con el mazo dando". Huelga traer a
colación las más disímiles situaciones de la vida en que con ciertas frases se da un
tratamiento poco delicado a Dios. Nuestra rebeldía no es atea, es agnóstica.
Nadie sabe por qué, tal vez por la tendencia a mezclarse que todo tiene en nuestro
terruño,__ porque allí se fundieron en el crisol, como en ninguna otra parte españoles,
canarios, gallegos, catalanes, vascos, negros, asiáticos __ pero lo cierto es que en nuestra
ética y estética no nos parecemos a nadie, somos lo mismo frívolos y dicharacheros por la
parte valenciana que trabajadores y toscos por la parte isleña. De Africa traemos el ritmo,
de un significado mucho más profundo que en lo que a la música se refiere; el ritmo nos
domina hasta en el modo de pensar. Por tanto, creo que la iglesia católica pudo librarse
del panteón yoruba en la misma medida en que se internó en las masas populares; poco
significativa.
5.- Se repite la historia.
La terquedad neurótica del exiliado durante casi medio siglo demuestra que la experiencia
de la vida es subjetiva, preñada de mecanismos mentales viciosos, que no enseña cuando
no se tiene el deseo de aprender. Lo que lo descalifica para tener un voto en el destino de
Cuba.
El pasado ejemplo de Estrada Palma deslumbrado por el sistema político del Norte, __lo
que de paso nos llena de dudas al pensar que José Martí no debió estar ajeno a dichas
tendencias y más bien lo elogió en ocasión de fundar una escuela__debe alertarnos sobre
los patriarcas que pasan mucho tiempo en casa del adversario, pues suelen ser sus
preferidos ante los que se quedaron.
¿Quién ha olvidado la respuesta de Bartolomé Masó, el patriota menos favorecido por la
fama, al gobernador americano que le brindaba su apoyo en contra de Juan Gualberto
Gómez, " un negrito de pésimos antecedentes morales"?. Perdió Masó. Ganó Estrada
Palma. Perdió Cuba. Mientras Masó mantenía la antorcha de lucha en Oriente junto a
otros patriotas, sin la cual ni Martí, Maceo o Máximo Gómez hubieran podido encender
la guerra posteriormente, algunos patriarcas exiliados desarrollaban una admiración
subconsciente y un agradecimiento inmenso al país del Norte. No hay que culpar
personalmente a Estrada Palma, sino a sus circunstancias. Otro quizás hubiera actuado
igual.
Todo es cuestión de medida en conceptos tales como agradecimiento, simpatía,
admiración.
En asuntos patrióticos el hombre de recto entendimiento es un caballero que rechaza
cualquier ofrecimiento y guarda su corazón para su amada.
De que la conversión de La Habana en Miami es un peligro concreto en la eventualidad
de la derrota del socialismo en Cuba puede dar fe cualquier ciudadano imparcial que haya
vivido en el país del norte. De que esto no sucederá lo sabe el que comprenda la historia
y la interprete como un legado vivo de heroísmo ante la mala fortuna y la traición. Yo no
digo que la vida en los Estados Unidos sea absolutamente mala o buena, sólo que está
hecha para gente diferente. El balance entre cosas buenas y malas se hace inaceptable
para un cubano medio.
Lo bueno no es igual. Lo malo es demasiado malo.
En estos momentos el movimiento disidente en Cuba parece estar deseando lograr una
unidad finalmente.
Si no es que Radio Martí, como siempre hasta ahora, se deja llevar por una euforia
circunstancial, __un viejo amigo mío, disidente de la línea dura, decía que uno
constantemente tenía que mirar para la calle en busca de lo que estaban anunciando__ se
concretaría el peligro que muchas le advertí a las autoridades cubanas: el
aprovechamiento oportunista __en el mejor sentido político de la palabra__ del grueso de
los grupos contestatarios; frustrados, opacados, autorrealizados en sentido peyorativo; los
últimos mohicanos de la guerra fría; los que intercambian información subjetiva con El
Nuevo Heraldo y con Radio Marti, cuya programación, comparada diariamente con la
Radio Pública Nacional de Estados Unidos, produce estupor. Sólo que la programación
de la NPR es autofinanciada por el propio radio-escucha, que no admitiría esa concepción
idílica de la vida norteamericana que brinda la VOA para Cuba, gracias a una
programación financiada con dinero del contribuyente.
El gobierno cubano sigue perdiendo buenas oportunidades de facilitar la actuación del
bloque europeo en contra de la injerencia de la ley Helms-Burton en los asuntos del
mundo, que no sólo la denuncia sino que amenaza con sanciones a los miembros que la
acaten. No es cambiar al multipartidismo de inmediato, cosa poco menos que imposible,
porque no hay figura ni masa para tal, ni los disidentes han llegado a las plazas, ni
llegarán mientras no se desentiendan de un aliado tradicionalmente odioso para el común
de los latinoamericanos. Hay menos razón para exigir una democracia multipartidista en
Cuba que una democracia multirracial en los Estados Unidos.
Oportunidades de escuchar y responder a los que se han expresado de modo legal y ético,
como ha hecho siempre Elizardo Sánchez Santacruz, que no participa de pachangas
políticas, a diferencia de casi todo el resto de advenedizos y oportunistas. Excepción
hecha de alguna que otra pifia; por ejemplo, el decir que Cuba y Miami son el mismo
pueblo.
De los que apoyan el embargo, aspiran al establecimiento de una democracia americana y
un neoliberalismo en Cuba, niegan lugar y necesidad históricos a la Revolución y
combaten a una sociedad que los soporta como ninguna democracia del mundo tolera a
sus minorías, es mejor no hablar. Yo creo que el gobierno cubano los protege por
motivos prácticos al evitar que las grandes masas se aperciban de sus actos, con lo que
invalida los argumentos apocalípticos de unos cuantos, según los cuales Castro quiere
hundir la isla, aunque no explican qué está esperando. De quererlo el gobierno, el
movimiento contestatario quedaría aplastado en unas cuantas horas, con lo que nadie
ganaría.
En la conocida fórmula del enemigo y el rehén siempre ha existido un interés de la tercera
parte, que es lo que dá sentido al asunto. Ahora el exilio quiere, según su lógica torcida,
que el enemigo y el rehén se hundan juntos.
¿No será que barruntan que no hay tal caso, y que el pueblo está porque es?.
posted by Mike L Palomino 6:03 PM